L4. EL PENSAMIENTO MODERNO

La lectura comienza definiendo bien sus términos, pues, si queremos saber acerca del pensamiento moderno debemos de saber a qué nos referimos con "moderno", y es entonces cuando Villoro hace la pregunta de si en verdad estamos cambiando hacia una nueva era o si solo estamos experimentando una suma de cambios ligeros dentro de un mismo movimiento. 

Así es como empieza a proponer un sistema por el cual podremos determinar qué lo "moderno", pues a lo largo de su existencia ha tenido tantas caras, corrientes, ideas y singularidades que es difícil el homogeneizar todo bajo la misma etiqueta; el sistema consiste en analizar cada uno de los grandes referentes de lo moderno y encontrar entre ellos ideas básicas que sirvan para identificar la verdadera esencia de lo moderno.

-Generalmente se entiende por "pensamiento moderno" una forma de pensamiento racional que tendría su expresión más clara en el siglo XVIII. A menudo, la idea de la historia y del mundo ilustrada, su proyecto de racionalidad, se toman como paradigma de la modernidad. Pero en realidad sus orígenes son más antiguos. Empiezan con la ruptura medieval del mundo y con la aparición paulatina, en algunos ingenios, de una nueva. La ruptura se inicia con el renacimiento.-

Ciertamente la modernidad, durante los cuatro siglos que nos ha acompañado ha divergido del espíritu con el que surgió, si en un principio nos ayudó a superar crisis generadas por la ignorancia y el irracionalismo, nos empujó a una era de descubrimientos, de valentía y coraje propio, de búsqueda de la verdad, ahora el pensamiento moderno empieza a entrar en crisis sobre todo en los países desarrollados y en vías de desarrollo, en donde el pensamiento moderno parece haberlo dado todo.

Se vive una situación de desencanto.

El gobierno, que en su concepción más pura es el arte de proyectar y decidir el futuro de una sociedad, se ha vuelto cada vez más el funcionamiento de una maquina regulada, la ingeniería del poder. Con el racionalismo del pensamiento moderno y con el desarrollo del capitalismo en los países de primer mundo, surgieron dos situaciones, la persona privada y el hombre masa; el primero es egoísta, solo ve por si mismo y está demasiado ocupado en sus asuntos como para interesarse por los demás, el segundo es un producto del primero, al debilitarse los vínculos de comunidad que mantenían estables a las sociedades ahora el ser humano se ve enfrentado solo a un mundo hostil y abstracto, del que forma parte y en el que se incluyen a otros miles y millones como él, todos tan insignificantes como los demás.

A pesar de esto, nada es nunca seguro, las épocas no cambian rápido y menos aún lo hacen las ideas que las influyen. Solo nos queda esperar o actuar.