LA CUEVA, EL PRIMER HOGAR DEL SER HUMANO.

 Reflexión sobre la cueva Chauvet-Pont d'Arc.

Tras ver el recorrido de la cueva nuestro equipo (equipo 4) comenzó a dar sus diferentes puntos de vista y nuestra reflexión fue la siguiente:

Hay varios animales que crean "hábitats" dentro de la tierra como lo pueden ser roedores y reptiles, pero el ser humano dio un paso más allá y se estableció de vez en cuando en estas grandes cuevas. El ser humano no comenzó como un animal sedentario ya que su mismo estilo de vida y las condiciones del entorno no lo permitían, el ser humano primitivo se nutría de la caza y la recolección allá por donde fuera y estaba obligado a moverse siguiendo a sus presas y escapando del frío en las temporadas de invierno. 

Pero mientras más inteligente se volvía el ser humano, menos era su dependencia de la naturaleza tal como era. Un gran paso fue que el ser humano adoptó las cuevas para su habilidad, la cueva representó entonces el refugio de nuestra especie ante los peligros de la naturaleza y esto significó un cambio en la manera de vivir del humano primitivo.

Usaban las cuevas para su vida diaria, en ellas socializaban, dormían, comían, procreaban, jugaban, enseñaban, trabajaban las pieles de los animales, las cuevas fueron el primer hogar del ser humano.

Las pinturas rupestres en estas cuevas podrían estar relacionadas con la enseñanza y según nuestras conclusiones, también al deseo de trascendencia inconsciente que desde entonces poseíamos.